Fraude patriótico y la Restauración Conservadora
"En varias partes del país, la policía confiscó las papeletas electorales de conocidos adeptos a la oposición. Los seguidores de Justo falsificaron listas de votantes, y en algunas jurisdicciones los muertos fueron resucitados en grandes cantidades, para que emitieran sus votos (...) Una treta común de la época era sobornar a votantes para que aceptasen sobres cerrados con papeletas ya marcadas (...) Cambiaban las urnas electorales, ponían un policía de guardia en las cabinas de votación y hacían arrestar a miembros de la oposición el día de las elecciones, con falsas acusaciones (...)".
Fragmento de "Argentina 1516-1987. Desde la colonización española hasta Raúl Alfonsín" de David Rock.
"Más bien que elecciones fraudulentas corresponde decir que en esas ocasiones no hubo elecciones, porque nadie pretendió hacer creer que había actos eleccionarios normales en que el pueblo había expresado su opinión. Más que parodia de elecciones hubo en esos casos y en otros parecidos negación ostensible y confesa del derecho electoral del pueblo argentino o de una parte de él".
Federico Pinedo (Ministro de general Justo), La Argentina en la vorágine, Buenos Aires, Mundo Forense, 1946.
El nuevo estado en manos de unos pocos
"Expresión de una alianza de elites, los miembros de la "restauración conservadora" se mantuvieron en el poder a partir del endurecimiento de las estructuras políticas poniendo en práctica el fraude –alterando los resultados de los comicios–, la proscripción –no dejando participar a los radicales en las elecciones– y la represión –persiguiendo a los opositores–. Así, a partir de 1934 según Peter Waldman, el "Estado fue adoptando cada vez más las características de una máquina de opresión, que ayudaba a la minoría gobernante a mantener en jaque a la mayoría de la población y a explotarla económicamente". Según Gino Germani el lapso comprendido entre 1930 y 1943 está clasificado como "un retroceso artificial a un sistema de participación limitada". Lo que se puede destacar como "artificial" fue el manejo a través del fraude de las condiciones legales establecidas por la Ley Sáenz Peña. A través de las prácticas fraudulentas el grueso de la población fue excluido de la participación en las decisiones políticas, a pesar de la continuidad de la apariencia democrática."
Extraído de Historia Argentina - Polimodal de M. Cecilia de la Rosa y C. Gómez, EDIUNC.